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Bernardo Reyes
Nació en Guadalajara, Jalisco, en agosto de 1850. En 1885,
poco después de obtener su grado de General, fue comisionado por
Porfirio Diaz
para hacerse cargo de la situación política y militar en los estados del norte
de México.
Llegó a Monterrey como Jefe de Operaciones, pero el 12 de
diciembre de 1885 se hizo cargo del Gobierno de Nuevo León, por designación del
Senado de la República, que consideró desaparecidos los poderes locales. Desde
entonces y hasta el año 1909, fue el árbitro de los destinos de Nuevo León,
Coahuila y Tamaulipas, entregando finalmente el mandato sobre el destino de
Nuevo León al Lic. Leobardo Chapa, Presidente del Supremo tribunal de Justicia,
quien con ese carácter fue Gobernador Interino.
Desde principios de 1900 y hasta finales de 1909 estuvo
realmente separado del gobierno ya que desempeñaba el cargo de Secretario de
Guerra y Marina, puesto que dejó finalmente en manos del Lic. Pedro Benítez
Leal.
En medio de sus múltiples ocupaciones como gobernante y
militar, Bernardo Reyes se tomó tiempo para escribir múltiples libros en los
temas más diversos.
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